Artículo publicado en Viva El Puerto
Bajo el rimbombante nombre de ordenanza reguladora de la prestación patrimonial de carácter público no tributario n° 1, por prestación del servicio de suministro domiciliario de agua y ordenanza reguladora de la prestación patrimonial de carácter público no tributario n° 2 por prestación del servicio de alcantarillado y depuración de aguas residuales se esconde una subida del recibo del agua del 16,4% a los portuenses aprobada por el rodillo absoluto del alcalde en el último pleno ordinario. Esto, por supuesto, no lo leerán en sus redes sociales.
Lejos quedan aquellos tiempos en que el portavoz del Partido Popular en la oposición, G. Beardo, recorría las calles de la ciudad afirmando que cuando fuese alcalde bajaría todos los impuestos y tasas municipales. Hoy el alcalde Germán B. aplica una brutal subida al recibo del agua sin que ello suponga ninguna mejora ni repercuta de ninguna manera positiva en los portuenses.
Estábamos avisados: en 2021 Izquierda Unida fue el único grupo municipal que denunció el acuerdo del Consejo de Administración de la sociedad mixta APEMSA para subir el recibo un 5,1% para el año siguiente. Un acuerdo aprobado con los votos a favor de Partido Popular, Ciudadanos y VOX. Aquella subida no llegó a aplicarse pero era cuestión de tiempo -y de rodillos. Ahora, con las manos libres, ya no hay pegas para cumplir las voluntades del socio tecnológico que venía a aportar su know-how: Aqualia-FCC.
La gestión del agua no es cualquier cosa, y menos en El Puerto. Por estas fechas se cumplen diez años de la privatización de nuestra empresa municipal de aguas, considerada por todos la joya de la corona de la administración portuense. APEMSA fue malvendida fruto de la mala gestión del gobierno del Partido Popular y el Partido Andalucista, y desde aquel día pasó a ser una sociedad mixta donde el socio minoritario tenía el control de a al la gestión diaria y además, se garantizaba no perder nunca un euro. Prestar un buen servicio y aportar conocimientos de gestión está muy bien, pero aquí hemos venido a hacer dinero sea directamente a través de la factura o a través de los presupuestos del Ayuntamiento.
El tiempo nos ha dado la razón a los miles de portuenses que salimos a las calles y nos encerramos en nuestro ayuntamiento exigiendo que no se privatizase nuestra empresa municipal de aguas. Dijimos que convertir un bien de primera necesidad como el agua en una mercancía traería consecuencias que terminarían pagando los portuenses. No nos equivocamos.