Sábado 21 de octubre. Enfrentábamos el sábado sabiendo que sería una jornada agotadora. Estábamos en movimiento desde las 23.00 de la noche del viernes y finalizamos nuestro viaje veinte horas después, contando que no tuviéramos demasiados sobresaltos en el itenerario previsto.
Nuestro avión salió de Tinduf a las 3 de la mañana y nos dejó en la terminal nacional del aeropuerto de Argel a las 5 en punto de la mañana. Pasamos a la terminal internacional donde tuvimos que esperar unas 5 horas hasta coger nuestro vuelo a Madrid habiendo dormido poco o muy poco.
El vuelo se retrasó unos 30 minutos sobre el horario previsto y pisamos el aeropuerto de barajas a las 12.30. Allí nos despedimos de algunos compañeros y compañeras de viaje mientras nosotros/as cogíamos el cercanías hasta Atocha para encarar la tercera y última etapa de viaje hacia El Puerto. Nuestro tren hacia salió a las 16.15 y cumplió su horario como un reloj. A las 19.40 estábamos en la estación de RENFE poniendo fin oficial a esta aventura de 15 días en los campamentos de refugiados saharauis. En el mismo sitio donde empezamos, pero con una paliza considerable sobre nuestras espaldas.
Así terminamos. Con esta entrada pongo fin a este pequeño diario de lo que ha sido esta brigada. En los próximos días iré añadiendo alguna información extra, fotos, vídeos etc... para enriquecer con más contenido la serie de post. He decidido no cambiar el texto. Así lo escribí estando allí, con mis percepciones y puntos de vista, y creo que así debe quedarse.
También tengo la idea de escribir un epilogo a este viaje, pero lo haré una vez haya pasado el tiempo suficiente para poder madurarlo todo tranquilamente y aportar algo más de lo contado en la crónica diaria.
Y después de todo solo hay una forma de despedirse: ¡Viva el Sáhara Libre!