Ayer se produjo una de las noticias más importantes e inesperadas de 2014 en cuanto a política internacional se refiere: EEUU y Cuba restablecen relaciones diplomáticas después de 53 años y, como primera consecuencia, los tres héroes antiterroristas cubanos presos en suelo norteamericano vuelven a casa. Por fin los cinco están juntos en Cuba.
Quizás por haber estado allí este verano soy consciente de no poder ni imaginarme la alegría y la emoción que estarán viviendo tantísimos/as cubanos/as viendo que 16 años de lucha incansable por la justicia han dado su fruto. No puedo más que celebrar la liberación de Gerardo, Antonio y Ramón pues supone el fin de una larga del pueblo cubano contra la injusticia y en defensa de los derechos humanos.
Ahora, habrá que estar alerta para que el restablecimiento de relaciones entre EE.UU. y Cuba no sea un impedimento para la independencia y soberanía del pueblo cubano y, a su vez, conlleve de forma urgente el fin del injusto bloqueo comercial, económico y financiero que tras 54 años ha intentado ahogar a la isla y minar el ánimo del pueblo cubano y su defensa del socialismo.
En palabras de Barack Obama "tratar de impulsar a Cuba hacia el colapso no nos ha servido en los últimos 50 años". Cuba resistió y hoy Cuba ha vencido, demostrando una vez más que Cuba ese bastión de la dignidad no solo latinoamericana sino del mundo. ¡Aquí no se rinde nadie! ¡Viva Cuba!