Hoy se cumplen 35 años del atentado terrorista que costó la vida a cinco abogados laboralistas de CCOO y del PCE cuando un grupo de pistoleros de extrema derecha entraron en su despacho del centro de Madrid asesinándolos brutalmente. Hecho que será conocido como la matanza de Atocha.
Mientras, esa misma ultra derecha sienta hoy a un juez en el banquillo por investigar el franquismo y hace unos días Manuel Fraga, hombre del régimen, murió plácidamente a los 89 años sin ser juzgado por su participación en ese régimen franquista y su responsabilidad directa por ejemplo en los sucesos de Vitoria. Y no solo eso, sino que además fue despide con un funeral de Estado. España es así, un país lleno de demócratas de toda la vida.