Ahí va un post rápido a raíz de una conversación sobre el momento actual de El Puerto. Llama la atención la evolución (decadente) que ha sufrido esta ciudad en muchos aspectos, pero sin duda, uno de los más llamativos es el referente a la exaltación religiosa en el ámbito público y fomentada por el Ayuntamiento desde la llegada de Alfonso Candón.
Esto no es nada nuevo, se trata fundamentalmente del resultado de aplicar el modelo de sociedad defendida por el Partido Popular que no encaja con la Constitución del 78, tan venerada y sacralizada por la derecha española-
Si nos vamos a la Constitución Española de 1978, que aunque sea papel mojado no deja de ser la norma suprema que todavía articula la vida en este estado. En su artículo 16.3 dice lo siguiente:
Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones.
Es decir, establece la aconfesionalidad del estado. Ahora, nos vamos a Wikipedia para saber qué es eso del estado aconfesional:
Un Estado aconfesional es aquel que no se adhiere y no reconoce como oficial ninguna religión en concreto, aunque pueda tener acuerdos (colaborativos o de ayuda económica principalmente) con ciertas instituciones religiosas.
Ahora, prestemos atención a esta serie de fotografías y juzguemos la notable evolución que ha ido sufriendo la administración pública local (algo bueno tenía que tener la hiperactividad fotográfica de nuestro nuevo alcalde):
2014, Febrero: Visita a la Virgen. Nuevo Alcalde, viajes tradiciones.
2014, Semana Santa. Las banderas del Ayuntamiento a media asta el viernes santo ¿Adivináis por qué?
2014, Julio. Iglesia y poder político paseando juntos por las calles. Falta el palio.
2014, Julio. La puerta principal del Ayuntamiento usado como altar durante el Corpus.
2014, agosto. Sagrada Misa tras conceder la Medalla de oro de la Ciudad a la imagen, repito IMAGEN, de la Hermandad del Nazareno.
2014, septiembre. Día de la Virgen de los Milagros, Patrona y Alcaldesa Perpetua de El Puerto. Aquí el Alcalde junto a miembros del gobierno local de Partido Popular y Partido Andalucista,y miembros de la oposición, en este caso de Ciudadanos Portuenses.
Estás son solo algunas fotos y algunos hechos, pero hay más. Así pues, parece evidente que una de las principales inquietudes del nuevo Alcalde de la ciudad desde enero de 2014, Alfonso Candón, consiste en servirse de su posición como primer edil de la ciudad para proyectar hacia el ámbito público sus creencias religiosas personales, arrastrando tras de sí a la administración local a un modelo próximo al nacional-catolicismo, es decir, una práctica caracterizada por la estrecha relación entre el poder político y la Iglesia católica, y por la influencia de esta en la sociedad.