Es un suma y sigue. Ya casi no quedan calificativos de asombro o sorpresa para describir las cifras de asistencia a los mítines del Frente de Izquierda. Tras la toma de La Bastilla y la Plaza del Capitolio de Toulouse el mitin en la Playa del Prado era la siguiente gran etapa en el camino del Frente de Izquierda hacia la presidencia de la República. En Marsella, segunda ciudad más importante de Francia, una vez más se superaron las expectativas: 120.000 personas asistieron al mitin en directo y otras 15.000 lo vieron a través de Internet.
Mientras en España celebrábamos el aniversario de la proclamación de la II República Jean-Luc Mélenchon se presentó en la playa del Prado como el tercer hombre en la carrera presidencial superando el 15% de intención de voto en varias encuestas y no defraudó. Todos los medios siguen reconociendo que el FG está haciendo de lejos la mejor campaña y que su militancia es la más dinámica. Como ya pasó con la toma de La Bastilla, el mitin de Mélenchon fue emitido en directo por televisión y consiguió abrir los informativos de las cadenas públicas y privadas. Otro exitazo.
Por una vez no hubo polémicas. En cualquier gran acto que se precie siempre suele haber disparidad en torno a las cifras pero esta vez los cálculos eran fáciles ya que el mismo ayuntamiento de Marsella (gobernando por la UMP) aseguró que la playa tenía capacidad para 100.000 personas. No solo la playa estaba abarrotada sino que había gente llenando el paseo marítimo e incluso la respuesta fue tal que provocó una manifestación espontánea que atravesó la ciudad pesar de que el Alcalde había prohibido cualquier tipo de acto más allá del realizo en El Prado.
Por una vez no hubo polémicas. En cualquier gran acto que se precie siempre suele haber disparidad en torno a las cifras pero esta vez los cálculos eran fáciles ya que el mismo ayuntamiento de Marsella (gobernando por la UMP) aseguró que la playa tenía capacidad para 100.000 personas. No solo la playa estaba abarrotada sino que había gente llenando el paseo marítimo e incluso la respuesta fue tal que provocó una manifestación espontánea que atravesó la ciudad pesar de que el Alcalde había prohibido cualquier tipo de acto más allá del realizo en El Prado.
Sólo queda una semana para la primera vuelta y nada está aún decidido. Los analistas reconocen que son las elecciones más abiertas de los últimos años. ¿Habrá sorpresa? ¿pasará Mélenchon a la segunda vuelta? ¿habrá sorpasso? Es bastante improbable pero nunca se sabe, las urnas están vacías y el FG está consiguiendo llenar de ilusión y gente las calles. De cualquier forma, como dice Jean-Luc Mélenchon, las elecciones no son el fin, el fin es la revolución ciudadana. La próxima cita será el próximo jueves 19 en París, último gran mitin antes de la primera vuelta de las presidenciales.